Proyecto ELEMO: Submarinos rusos Mir exploran el lago Lemán


Desde las aguas de Kaliningrado, Rusia, dos submarinos rusos de la clase Mir realizaron un extraordinario viaje atravesando Lituania, Polonia y Alemania hasta llegar a Suiza. Su destino: las cristalinas aguas del lago Lemán, donde llevarían a cabo una de las exploraciones científicas más ambiciosas jamás realizadas en este emblemático lago alpino.

Los protagonistas: Submarinos Mir-1 y Mir-2

Los MIR 1 y II son submarinos de autopropulsión, previstos para ser ocupados por un piloto y dos miembros de la tripulación. Pueden operar hasta en 6 mil metros de profundidad, aunque para la misión en el lago Lemán solo necesitarían descender hasta los 309 metros de profundidad máxima del lago.

Estas impresionantes máquinas de exploración, que pesan 18,6 toneladas cada una, fueron diseñados y construidos por la filial Oceanics de la empresa finlandesa Rauma-Repola y entregados en 1987. Con sus 7,8 metros de longitud y apenas dos metros de diámetro, están equipados con tecnología de vanguardia que incluye:

  • Brazo articulado para recolección de muestras.
  • Cámaras de alta resolución, incluyendo una móvil y otra que graba en tres dimensiones.
  • Sistemas de navegación y comunicación avanzados.
  • Autonomía de 24 horas bajo el agua.

Fama cinematográfica: de Hollywood al Titanic

Antes de su llegada al lago Lemán, los submarinos Mir ya habían ganado fama mundial gracias al director James Cameron. Cameron utilizó los submarinos Mir en más de 30 expediciones al Titanic, incluyendo las 12 inmersiones durante la producción de su película «Titanic» en 1997. Cameron alquiló las cápsulas Mir por un precio de 35.000 dólares al día para capturar las icónicas imágenes del naufragio que vimos en la gran pantalla.

«El Titanic era el Everest de los naufragios y, como buzo, quería hacerlo bien», declaró Cameron, quien también utilizó estos submarinos para filmar escenas de «Abyss».

El Proyecto ELEMO: Ciencia en las Profundidades

El proyecto ELEMO (Exploration des Eaux Lémaniques) fue coordinado por la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL) en asociación con el Institut National de Recherche Agronomique (INRA) y la Universidad de Savoie. Durante el verano de 2011, esta iniciativa multidisciplinaria reunió a especialistas de varios países para estudiar un lago que, pese a su popularidad turística, permanecía científicamente inexplorado.

Las Tres Zonas de Exploración

La expedición se centró en tres áreas estratégicas del lago Lemán:

  1. Bahía de Vidy (Lausana): Elegida por su alta densidad poblacional costera, esta zona permitió estudiar el impacto de las actividades humanas en los sedimentos submarinos y la ecología lacustre.
  2. Las Profundidades Máximas: A 309,7 metros bajo la superficie, una región en gran parte desconocida que reveló secretos sobre las corrientes profundas y la distribución de contaminantes.
  3. Desembocadura del Ródano: El cañón estudiado mide 14 kilómetros de largo y llega a tener, desde la confluencia con el Ródano hasta la zona más alejada de la costa, 300 metros de profundidad. Esta área es particularmente fascinante por los cañones submarinos inestables que forma el río al depositar 5 millones de toneladas de sedimentos anuales.

Descubrimientos científicos revolucionarios

Los resultados del proyecto ELEMO han sido extraordinarios. Los científicos demostraron una correlación entre la presencia de ciertas bacterias y metales pesados, y pudieron medir con precisión cómo se extienden los microcontaminantes por el lago Lemán desde las salidas de las plantas de tratamiento de agua.

Los misteriosos cañones submarinos

Los cañones, algunos de los cuales tienen 100 metros más de profundidad que el fondo del lago, fueron analizados extensamente por los submarinos MIR. La investigación ya ha demostrado que los cañones están constantemente cambiando en respuesta a eventos geológicos y climáticos.

Un descubrimiento particularmente revelador fue una gruesa capa de sedimento observada en la salida del cañón principal, evidencia de un deslizamiento submarino reciente, probablemente tras un gran evento de inundación en el río Ródano en 2000.

El legado de Jacques Piccard

La exploración submarina del lago Lemán tiene una rica historia. Jacques Piccard, padre de Bertrand Piccard (fundador del Solar Impulse), creó un submarino turístico llamado Auguste Piccard para la exposición de 1964. En los años siguientes, 32.000 personas visitaron las profundidades del lago Lemán.

Un submarino como los Mir utilizados por el proyecto ELEMO. Dos pasajeros más el piloto, pueden embarcarse en esta máquina de 18,6 toneladas que puede sumergirse a 6.000 metros de profundidad, con una autonomía de 24 horas.
Un submarino como los Mir. Dos pasajeros más el piloto, pueden embarcarse en esta máquina de 18,6 toneladas que puede sumergirse a 6.000 metros de profundidad, con una autonomía de 24 horas. Un brazo articulado permite la recogida de muestras ante. Un brazo más pequeño lleva una cámara y una segunda cámara puede grabar en relieve. Imagen: RTS.ch

Importancia ecológica y humana

Casi millón y medio de personas viven en la región del lago Lemán, que abastece de agua potable a la mitad de esa población. Con una superficie de 580 km² que se extiende entre Francia y Suiza, sus 89 km³ lo convierten en la reserva de agua dulce más grande de la Europa continental.

Continuidad de la investigación

Un año después de las inmersiones de los MIR, el programa ELEMO amplió sus investigaciones con observaciones aéreas usando aviones ultraligeros equipados con sensores. Los mismos experimentos se realizaron también sobre el lago Baikal en Rusia bajo el nombre «Proyecto Lemán-Baikal».

Más recientemente, la EPFL lanzó el proyecto «Lémanscope» en mayo de 2024, que busca reclutar aproximadamente 500 voluntarios con embarcaciones para analizar la calidad del agua ante amenazas como el cambio climático y la contaminación.

Un laboratorio natural único

«Nuestro lago es especial y no solamente por su belleza», explica Andrew Barry, profesor de Tecnología Ecológica de la EPFL. «La mayoría de los lagos son pequeños y el Coriolis no tienen impacto sobre ellos. Los grandes lagos norteamericanos son como pequeños mares, pero el nuestro tiene un tamaño mágico, con interacciones entre ciertas fuerzas».

El proyecto ELEMO no solo representó un hito en la exploración lacustre, sino que demostró cómo la colaboración internacional y la tecnología de vanguardia pueden revelar los secretos más profundos de nuestros ecosistemas acuáticos. Los submarinos Mir, famosos por sus expediciones al Titanic, encontraron en el lago Lemán un nuevo escenario para contribuir al conocimiento científico y la conservación ambiental.


Datos técnicos adicionales:

  • Profundidad máxima de los Mir: 6.000 metros.
  • Autonomía: 24 horas.
  • Capacidad: 3 personas (piloto + 2 investigadores).
  • Peso: 18,6 toneladas cada uno.
  • Velocidad de inmersión: 35-40 metros por minuto.

«Artículo originalmente publicado en 2011, actualizado en 2024 con nueva información científica y resultados del proyecto ELEMO


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *